23 de noviembre de 2012

Estamos Jodidos Mexicanos

Pablo Jair Ortega - pablojairortegadiaz@gmail.com.Aunque ya le dijeron que hay cosas más importantes que sus ocurrencias mañaneras después de una peda presidencial oyendo a su cuate Joaquín Sabina, el presidente Felipe Calderón está plenamente convencido de que ya no nos debemos llamar Estados Unidos Mexicanos, porque en México, como en todo el mundo, nos conocen como mexicanos, hijos del nopal y fervientes admiradores del Chicharito.

Es como al futbolista del Manchester efectivamente le pasó… ¿Para qué carajo ponerle en la playera Javier Hernández si suena más chido Chicharito?

Pero el debate se centra entonces qué pasará con tanta documentación que dice ahí clarito ESTADOS UNIDOS MEXICANOS. ¿Se imagina usted volver a imprimir pasaportes, actas de nacimiento, certificados, títulos? No vaya a ser que todo esto va a acabar como reciclaje y vaya directamente, como las boletas del IFE, a convertirse en papel “paca”…

Esto del cambio de nombre, dijo Don Beltrone, no tiene la menor importancia. Que había cosas más importantes como meter a Peña en chinga al Congreso a tomar protesta y salir como diarrea directo al Palacio Nacional para evitar las naques del PRD y los pejistas.

Estudios más serios (o sea, chacota tuitera que ya la ven como apestadita en Gobierno del Estado) indican que puede ser viable el cambio de nombre y de "México" pasemos a ser "Chapolandia" o "Estamos Unidos Los Zetas".

El nuevo nombre de "México" tambíen puede ser "República Propiedad de Carlos Slim" o "Somos territorio Telcel"

O como dice una periodista sureña: “¿Y si cambiamos el Himno Nacional Mexicano por una "sabrosa y pegajosa" rola de Pitbull? Ya tu sabe Mexico”… Y ya que andamos cambiando los nombres y eso, propongo que el nuevo escudo de la insignia nacional sea ¡Una Gaviota!

Tal vez si ponemos a votación el nuevo nombre de México en Latinoamérica, el que triunfaría sería “Qué bonita vecindad” o “República Don Ramón” o “Nación Se Me Chispoteó”, y esto porque el Cat fue testigo de que allá en el cono sur, rumbo a la Patagonia, Chespirito es algo así como Dios.

Aunque quizás tiene razón El Padrino Don Beltrone: hay cosas más importantes que andar cambiando de nombre, himno y bandera.

Por ejemplo, óyeme tú, Benedicto, ¿cómo está eso de que no había ni mula ni buey en el nacimiento? ¿Ora qué chingao pongo en el arbolito? ¿A quién le pido descuento por dos figuras inservibles? ¿Se va a prohibir la canción del “Arre Borriquito”?

Y estoy seguro que sí hubo por lo menos una mula y un buey, porque esos nunca faltan en esto que llaman vida.

* Gracias a @catmorales007, @ChispitaMX, @Isra_ortega y @Oscar_Fuentes_O.

No hay comentarios.: