10 de febrero de 2010

¿Qué le pasa a la policía del estado de Veracruz?



Pablo Jair Ortega - pablojairortegadiaz@gmail.com.- En las camisas y playeras negras del uniforme de la policía veracruzana se lee una leyenda grande y casi fosforecente en la espalda: POLICÍA DEL ESTADO DE VERACRUZ. Fue una de las innovaciones de este sexenio por estandarizar los uniformes de las corporaciones en el estado, al igual que pintar todas las patrullas de blanco y negro, tanto de Policía como de Tránsito del Estado.

Fueron los únicos que se salvaron de ser pintados de rojo. Bueno, Córdoba ya tiene sus patrullotas de lujo que desentonan con la uniformidad, aunque no sirven para nada porque ni siquiera intervienen cuando ciudadanos llegan corriendo al Palacio Municipal pidiendo auxilio.

Bueno, el asunto es que la mayoría de los policías fueron rotulados para demostrar con orgullo que son jarochos pese al padecimiento de muchas limitaciones como salario, falta de uniformes, armamento, y que los ha llevado a realizar varias protestas en la capital del estado.

Pero lo ocurrido recientemente con el señalamiento de abuso sexual de elementos de la Policía Intermunicipal de Poza Rica (dependiente de la Secretaría de Seguridad Pública), así como la literal madriza que le acomodaron a aficionados en un encuentro de futbol en el estadio “Pirata Fuente”, prende las alarmas. Ambos en el mismo fin de semana, ambos aberrantes.

Es cierto: los policías responden de acuerdo al momento, pero la imagen que anoche presentó el noticiero Televisa Deportes van más allá de un simple enfrentamiento con civiles (independientemente de si estos andaban drogados, borrachos, o gritaban recuerdos para las respectivas jefecitas) y se convierte en una bola negra de imparables elementos de la Policía Intermunicipal de Veracruz que arremeten como pandilleros contra una persona que yacía en el suelo. Ya controlada, ya sometida, pero que le dejaron de recuerdo algo más que las trinches camisitas reclamadoras que venden en el puerto.

La patiza jarocha, al más puro estilo de la Mara Salvatrucha cuando bautizan a sus nuevos paras.

¡Uy, imagínese que hubiese sido Cabañas el pateado! ¡No se la acaba hoy el Gobierno del Estado! No obstante, la poderosa televisora dio un repasón ayer porque los elementos amenazaban a sus reporteros, exigiéndoles con insultos que borraran el material grabado y transmitido este martes por la noche en el noticiero.

Luego la violación de dos jovencitas a manos de elementos de la Secretaría de Seguridad Pública el pasado domingo, donde hasta el momento las autoridades estatales se deslindan del delito que cometieron al menos tres elementos de la Policía Intermunicipal Poza Rica-Tihuatlán-Coatzintla.

De acuerdo a información del portal hermano LaNigua.com: “Ninguna autoridad se ha pronunciado en relación a la violación en la que incurrieron Luis Alberto Torres Luis, policía tercero; Filiberto Méndez Bautista, policía raso, Ernesto Leopoldo Hernández Almazán y Luis Pérez García, sub oficial de esta corporación, quienes la madrugada detuvieron a tres jovencitas de quince años que caminaban sobre el bulevar Petromex para dirigirse a su domicilio, luego de que intentaron que se les permitiera la entrada a un antro sin éxito”.

Dos casos que sin duda tienen que atender de inmediato en Gobierno del Estado. Lo grave es que aparte de los delitos de violación, golpes, abuso de autoridad, amenazas, no vaya a haber una sanción para los malos polis.

Es en estos momentos donde se debe demostrar orden, disciplina y apego a la ley, no persecuciones vengadoras a las que están acostumbrados los mandos de formación militar incrustados en la ESE-ESE-PE.

Loco fin de semana para los policías de Veracruz. En verdad, aberrante… O como dijo Javier Alarcón, “patético”.

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